Hoy vamos a trabajar la comprensión escrita del nivel B2, y un poco de vocabulario. Vamos a hablar de la medicina tradicional y alternativa, que es un tema del que también se habla mucho hoy en día.
Para empezar, vamos a hablar un poco, y ver vocabulario relacionado con este tema. ¿Conoces todos estos tipos de terapias, medicinas tradicionales, y medicinas alternativas que aparecen en la imagen? ¿Haces uso de alguna de ellas? ¿Das importancia tanto a la salud física como mental? ¿Crees que la medicina alopática es la única que realmente funciona?, o ¿eres de los defensores de las medicinas alternativas y de las diferentes terapias?
Vamos a ver si entendemos cada palabra: une cada tipo de medicina/terapia con su definición:
Ahora vamos a leer un artículo sobre las terapias alternativas, y contestar las preguntas:
Terapias alternativas
Personas con cáncer en peligro por el uso de la medicina alternativa
“Científicos advierten sobre los peligros que las terapias complementarias y alternativas pueden causar a las personas con cáncer, pues cerca de un tercio de los pacientes las usan además o en lugar de la medicina convencional, y lo más preocupante es que muchos de ellos no lo hablan con su medico. De acuerdo con una carta de investigación publicada por la revista científica JAMA Oncology, de los 3,100 pacientes de cáncer que respondieron a una encuesta sobre su enfermedad y el uso de medicina alternativa, más de 1,000 informaron haber usado esos tratamientos y de ese número, alrededor de un tercio confesó que no lo habló con su médico. Esto es considerado un problema potencialmente peligroso por los científicos, ya que este tipo de terapias pueden traer graves riesgos a la salud, especialmente si las personas suspenden sus tratamientos convencionales para seguirlos.
A ello se suma que medicamentos alternativos, como suplementos de hierbas, de los más populares entre los pacientes con cáncer, no cuentan con una regulación y pueden tener interacciones adversas con los tratamientos tradicionales de los pacientes, como la quimioterapia y la radiación. Uno de los mayores peligros son los altos niveles de antioxidantes que contienen y que pueden interferir con la radiación. Los suplementos de hierbas incluso pueden volverse peligrosos en combinación con ciertos medicamentos recetados, de acuerdo con la revista Time.
La medicina homeopática, curación con energía, y terapias de la mente, fueron otros de los recursos a los que acudieron los pacientes con cáncer, no obstante la poca evidencia que se ha encontrado de que estas alternativas funcionen. De hecho, en 2015, una investigación sobre 225 estudios que apoyaban homeopatía, realizada por el Consejo Nacional de Salud e Investigación Médica (NHMRC) en Australia, arrojó que no existen pruebas de alta calidad para respaldar esta práctica. “Estos estudios tuvieron muy pocos participantes, mal diseño, mala conducta y/o informes para permitir sacar conclusiones confiables sobre la efectividad de la homeopatía”, afirmaron los científicos australianos en ese momento en un comunicado. “Las personas que eligen la homeopatía pueden poner en riesgo su salud si rechazan o demoran los tratamientos para los que existe buena evidencia de seguridad y efectividad”, afirmó Warwick Anderson líder del NHMRC. “Las personas que están considerando si usar o no la homeopatía deben primero obtener el consejo de un profesional de la salud registrado y, mientras tanto, seguir tomando cualquier tratamiento recetado”, concluyó. Por su parte, los científicos de la carta de investigación publicada por JAMA Oncology afirman que, entre muchas razones, los enfermos suelen recurrir a estos tratamientos debido a “síntomas persistentes, trastornos psicológicos u obtener un sentido de control sobre su atención”, y estas terapias pueden ayudarles con estos problemas. Sin embargo, no todos los tratamientos pueden perjudicar a los pacientes, ya que algunos son recomendados por los oncólogos, como el yoga y la acupuntura, las cuales fueron usadas por un 7% de los pacientes, según la encuesta, y pueden ayudar a mantener a las personas en forma y con energía durante sus tratamientos de quimioterapia y radiación. Es seguro recurrir a estas terapias específicas, pues incluso muchos hospitales cuentan con centros de medicina alternativa donde las emplean en los pacientes para reducir los efectos secundarios de los tratamientos convencionales, mejorar el sueño y disminuir el estrés en los enfermos. La recomendación de los especialistas es que los pacientes siempre deben hablar con sus médicos sobre las opciones a las que quieran recurrir antes de poner en peligro la efectividad de su tratamiento y su salud.
(Texto adaptado de: https://www.telemundo.com)
Contesta a las preguntas según el texto anterior:
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